Dos amigos decidimos animarnos a la locura. Con casi nada, salvo una enorme ilusión y muchas ganas, resolvimos que era ahora o nunca el momento de concretar nuestro sueño: recorrer el continente americano en moto. Ahí vamos.

jueves, 15 de octubre de 2009

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Quienes nos conocen saben que si hay algo que no nos ha caracterizado es nuestra valentía a la hora de relacionarnos con las ciencias médicas. Una aguja era capaz de paralizarnos en seco, quitarnos todos los colores de la piel y hasta hacernos replantear una decisión si ésta dependía de poner el brazo a la jeringa.
Pero por suerte apareció María Angélica, una enfermera fabulosa, que ha logrado amigarnos con las inyecciones. No es que ahora andemos pidiendo a gritos cualquier aplicación, pero si no hubiera sido por ella y algunas de sus compañeras de Epidemiología, encarar las 12 vacunas que nos teníamos que poner para completar un completo programa de inmunización, hubiera sido bastante más difícil.
Ya nos quedan sólo 3. Quién lo hubiera dicho.

2 comentarios:

  1. Ahora sí que es en serio...

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  2. ja! despues de comprar las motos y verlos cumplir con el calendario de vacunacion! yo creo que siii....es en serio!

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